La limpieza del jardín es una de las tareas más importantes dentro su propio mantenimiento. Además de por motivos estéticos, un jardín limpio será menos propenso a sufrir plagas de insectos y de hongos.
Su frecuencia estará marcada por la época del año y por las especies vegetales que tenga el jardín. Las labores de limpieza serán mayores si tenemos áreas con césped, arbolado de hoja caduca y estanques de agua. Al final de este artículo se incluye un breve calendario de las tareas de limpieza a lo largo del año.
Para caminos pavimentados o empedrados es recomendable usar una hidrolimpiadora También para limpiar las paredes y suelo de piscinas. Mediante agua a presión podemos quitar la suciedad adherida muy fácilmente. Una hidrolimpiadora de calidad la podemos encontrar en esta web.
Lo mejor para la limpieza de hojas caídas es el uso de los sopladores, los podemos encontrar de mano o de mochila. Con esta maquinaria es muy fácil amontonar las hojas en el suelo para poder recogerlas.
Una desbrozadora también es una máquina imprescindible para la limpieza de nuestro jardín. Además de cortar el césped en zonas donde no puede un cortacésped, nos sirve para acabar con la mala hierba, e incluso eliminar ramas, maleza y otros elementos indeseados en él de forma cómoda y rápida.
En el caso de tener superficies con césped artificial también podemos encontrar en el mercado máquinas barredoras y peinadoras.
En cuanto a herramientas para la limpieza del jardín tenemos la escoba metálica o jardinera, el cepillo, la escoba, el recogedor y la carretilla. Otro utillaje necesario son las bolsas de basura de gran tamaño y el equipo de protección necesario: guantes, mascarilla, gafas, tapa-oídos, etc. Para desinfectar las herramientas podemos utilizar una disolución de agua de entre 50 y 100 ml de lejía por cada litro de agua.
A continuación se expone en este artículo un breve calendario de las tareas de limpieza a lo largo del año.
·Enero: Revisaremos y limpiaremos las herramientas y maquinaría a usar, es época de poda de árboles y arbustos.
·Febrero: Es buen momento para los abonados de estiércol, siembras y plantaciones. Estas tareas requieren de gran limpieza de herramientas y maquinaría.
·Marzo: Es fecha de resembrar césped, realizar trasplantes, quitar malas hierbas y limpiar los estanques después del invierno. Comienza el crecimiento de las plantas con la entrada de la primavera y con este crecimiento el incremento de las tareas de limpieza en el jardín.
·Abril: El riego adquiere importancia si durante este mes llueve poco. Tenemos que revisar y limpiar el sistema de riego, ya sea éste por goteo o por aspersión. En zonas con aguas duras deberemos limpiar las tuberías por dentro aportando al agua de riego productos acidificantes que neutralicen la cal adherida. También empiezan a proliferar los problemas fitosanitarios causados por hongos y plagas de insectos en las plantas, se deben realizar tratamientos con fungicidas e insecticidas. Debemos calcular bien el producto a utilizar y si este es mezclado con agua nunca hay que guardar el sobrante, se debe hacer uso de todo y luego limpiar con agua tanto el depósito como el mecanismo de pulverización.
·Mayo: Se realiza con más frecuencia el corte del césped, el riego, quitar malas hierbas y los tratamientos fitosanitarios. Las tareas de limpieza se incrementan con la mayor necesidad de mantenimiento del jardín.
·Junio: Incorporamos a las demás tareas del jardín la aplicación de abonos de liberación rápida, las plantas se encuentran en plena actividad antes de su reposo estival. Si usamos abonos foliares haremos la misma limpieza descrita anteriormente para el depósito y sistema de pulverización. Llega el verano y debemos hacer una minuciosa limpieza de la piscina, de su sistema de depuración y de sus canalizaciones.
·Julio: Este mes en general es el más cálido del año y por lo tanto habrá que aumentar la frecuencia del riego. También debemos retirar a zonas más sombreadas las plantas más frágiles a la intensidad de los rayos solares. En cuanto a la limpieza destaca la retirada de las plantas que hayan acabado su ciclo vital floreciendo desde primavera hasta entrado ya el verano.
·Agosto: Este mes junto a julio suele ser muy cálido y debemos darle importancia al riego. Es momento de sembrar especies de floración invernal y primaveral. También es buen momento para realizar esquejes y para esta tarea las tijeras de corte o cuchilla a utilizar tienen que estar bien limpias y desinfectadas, de no hacerlo podemos hacer de estas herramientas un vector de transmisión de enfermedades de una planta a otra.
·Septiembre: Empezamos a reducir notablemente el riego del jardín sobre todo en el césped. Limpiaremos el jardín retirando plantas secas y hojas que empiezan a caer de las especies leñosas caducifolias que tenemos en el jardín, con este material podemos hacer compost.
·Octubre: Volvemos a reducir el riego en el jardín. Cada vez hay más hojas secas a retirar de las especies caducifolias. Las plantas empiezan a reducir su crecimiento y se preparan para el reposo invernal.
·Noviembre: Comienza la tarea de poda de arbustos y árboles caducifolios, también de los rosales. Tanto maquinaria como herramientas de corte deberemos de tenerlas limpias y desinfectadas constantemente, igual que comentábamos para los esquejes, sin la limpieza necesaria podemos sin querer transmitir enfermedades de unas plantas a otras.
·Diciembre: Seguimos con la poda y tiene mucha importancia la protección de las plantas más susceptibles a los rigores del invierno.
Recuerda que un jardín limpio será siempre más bonito y más sano que uno que no lo está. Que no te dé pereza limpiar el jardín.